Impuesto de renta
El pago de impuestos es una forma práctica de asegurar que las personas pertenecientes a unos límites territoriales, brinden un tributo monetario al Estado sin que exista una contraprestación, con el propósito de financiar ciertos espacios o servicios de carácter público.
Uno de los impuestos más comunes en Colombia, es el impuesto de renta o impuesto sobre la renta. Sin embargo, muchas personas aún no entienden del todo en qué consiste este impuesto, cómo se calcula y qué características lo componen. Por eso, en la nota de hoy queremos compartirle todo lo que debe tener en cuenta sobre esta tasa de contribución.
¿Qué es el impuesto sobre la renta?
Este impuesto aplica en todo el país, lo que significa que es de carácter nacional. Además, recae sobre personas naturales o empresas y se genera cuando en la suma de los ingresos de una persona se evidencia un incremento específico en su patrimonio. Es importante tener en cuenta que la declaración de renta se aplica cada año, por lo que comprende desde el 1 de enero hasta el 31 de diciembre.
¿Cómo se calcula el impuesto sobre la renta?
Para calcular el monto que corresponde a cada contribuyente, primero es necesario tener en cuenta qué es la renta bruta y qué es la renta líquida:
- Renta bruta: la renta bruta corresponde a la suma de los ingresos que obtuvo una empresa o persona natural durante todo el año, a lo que se restan los costos directos que fueron necesarios para la obtención de dicho monto como devoluciones, descuentos, costos, gastos y deducciones.
- Renta líquida: una vez se efectúan los descuentos correspondientes al monto total de ingresos en el año, queda como resultado una “base imponible”. Esa es la renta líquida sobre la cual se aplica el porcentaje determinado por el gobierno.
- Año 2019 = 33%
- Año 2020 = 32%
- Año 2021 = 31%
- Año 2022 y siguientes = 35%
Siendo así, el impuesto sobre la renta se obtiene una vez se aplica el porcentaje impuesto por el gobierno según el año correspondiente. Sin embargo, es importante tener en cuenta que existen algunas tarifas especiales que deben consultarse, ya que se generan descuentos o beneficios sobre el monto definitivo.
Por otro lado, se deben considerar las ganancias ocasionales y las remesas, que son aquellos ingresos que no hacen parte de las ventas contempladas dentro de la empresa o los giros habituales que recibe un persona natural. Como por ejemplo ganar la lotería o una rifa, recibir una herencia, el pago de indemnizaciones o la liquidación. A este tipo de ingreso se le debe prestar atención, ya que puede haber una exención aplicable sobre la declaración de renta.
¿Cómo obtener un saldo a favor?
El saldo a favor es un derecho que tienen las empresas o contribuyentes, al que se puede acceder cuando se está buscando recuperar el excedente que resulta de la declaración de renta. En pocas palabras, este evento ocurre cuando en lugar de pagar un monto a la DIAN, la DIAN debe compensar monetariamente al contribuyente. Esto sucede, cuando las retenciones en la fuente practicadas superan el impuesto que se debe pagar.
En caso de que se presente esta situación, la persona natural o la empresa puede pedir que se le haga una devolución del impuesto o puede solicitar una compensación. Esta última, puede aplicarse para suplir saldos o deudas pendientes con la DIAN.
Queremos recordarle que es muy importante acceder a la asesoría de un buen contador, con el propósito de estar al día con los impuestos y no generar ningún tipo de deuda. En nuestro Blog Altos Empresarios siempre estamos compartiendo lo último en noticias empresariales, para que usted esté siempre actualizado y pueda disponer de herramientas más pertinentes para estar al día en las actividades del mercado.
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